Lo primero es
lo primero, siempre amaneceréis pronto en Croacia. Parece que el inventor de
las persianas no se comió un solo rosco en toda Croacia, así que todo lo más tendréis
una cortinilla para que no os vean, pero nada preparado para que no entre la
luz del sol. Así que si sois como yo, que no puedo dormir con luz, a las 5 y
poco que amanece, os despertareis todos los días.
Lo mismo con
el inventor de las almohadas rellenas. Aquí solo vendió las almohadas, pero el
relleno no se lo compraron, así que vuestra cabeza se perderá y no sabréis si estáis
flotando o que pasa.
Después de
todo esto, resulta que además nos hemos dormido después de apagar la alarma y
hemos amanecido a las 9. Tarde para nosotros, sobre todo este día que queríamos
visitar muchas cosas.
Para mi
sorpresa el Bed & Breakfast que habíamos cogido no tiene Breakfast, menos
mal que si tenia Bed. Así que hemos tenido que ir a desayunar al restaurante del
camping cercano donde habíamos cenado el día anterior.
El típico
desayuno desangelado que ponen en toda Croacia, pero el camarero ha dicho algo
con su poquito ingles en plan: Continental Breakfast, homelette with jam y
hemos asentido los dos como tontos.
Lo bueno es
que el desayuno para los dos nos han cobrado solo 52 kunas (7,5 € aprox.). Lo
malo es que el día ha amanecido nublado y se ha puesto a llover durante casi
todo el camino.
Hemos seguido
la carretera hasta Zagreb hasta llegar a Rastoke.
Como siempre un caos con las señales de indicación de salida de la carretera. Nunca
se sabe si es cuando la ponen, 100
m . más adelante o a kilómetros. Esta vez ha habido
suerte por que había dos salidas, cada una a un lado del río y las dos estaban
conectadas por un puente.
En las fotos
el sitio parecía muy prometedor. Es una especie de zona de rápidos con muchas
cascaditas donde los locales han construido unas casas muy monas. Antes debía
haber varios molinos de agua que ahora han reconstruido.
Desde arriba
no hay grandes posibilidades de foto así que hemos bajado y nos hemos metido
por donde hemos podido pero parece que toda la zona de abajo han hecho ún
complejo hotelero y no hemos podido pasar ni ver gran cosa.
Hemos ido a la
otra orilla que es más pueblo pero ya esta lejos de la zona bonita y no se
puede ver lo interesante.
El día no
acompañaba así que hemos seguido carretera para adelante.
Otro punto que
queríamos visitar rápidamente era la ciudad de Karlovac. En ella confluyen 4 ríos y es conocida por la forma de
estrella de 6 puntas en bloques rectangulares que tiene. Digo yo que también será
famosa por que el nombre de la cerveza mas anunciada en toda Croacia es la Karlovacko (una especie
de San Miguel). Como seguía lloviendo y andábamos justos de tiempo lo hemos
pasado y continuado carretera hasta Zagreb.
Solo teníamos
pensado visitar la ciudad de Zagreb unas horas. En los diarios de viaje que
habíamos leído no decían gran cosa de la capital de Croacia y tampoco parecía
que tendría mucho que ver.
Aunque lo
desaconsejaban hemos entrado con el coche en el centro y hemos aparcado en un
parking de pago. Unas 5 Kunas la media
hora más o menos y como solo pensábamos estar 2 o 3 horas nos parecía bien. Un
poco caos de trafico esta ciudad y un poco difícil encontrar un parking, pero
lo hemos conseguido.
Nos hemos
dirigido a la oficina de turismo del centro para pedir un mapa, explicaciones y
una ayudita por que el día anterior mirando Internet no conseguimos ningún
alojamiento por la zona del castillo de
Trakoscan que es donde queríamos acabar el día.
La oficina de
turismo esta en la plaza del centro de la ciudad llamada TRG Bana J. Jelacica o
ban (gobernador) Josip Jelacic que es el que aparece en el billete de 20 kunas
(no confundir con eel de 200 que son muy parecidos) y que es una especie de héroe
nacional que abolió el sistema feudal, liberó a los campesinos, y no se si
algún de mister universo o más.
Que sepáis que
en ninguna oficina de turismo de Croacia encontrareis una i de información o
una t de turismo que os la identifique. Solo veréis una tienda o escaparate con
posters, y allí estará si hay suerte, pero de identificación turística clara
nada de nada.
Hemos entrado
y hemos pedido un mapa, nos lo han dado, hemos pedido información de que ver, y
por primera vez en Croacia nos han explicado mas o menos que vale la pena ver. Por
fin. Ya para la próxima, si la chica pudiera hablar más alto… Para el tema del
alojamiento nos han dado un panfleto con la dirección de un “Tourist
Accommodation info” que realmente es un Internet, tob@cco & Call Shop que
esta en la calle Skalinska 3. Vale hasta para dejar las maletas según la
publicidad. Volveremos sobre ello que vale la pena.
Lo mejor es que
nos han dado 3 guías además en español (impresionante documento inedito en este
país), y además bastante decentes y completitas. Una de Zagreb en general, otra
explicando cada monumento de Zagreb y otra de que ver en la región. Incluso las
fotos estaban muy logradas. Esto lo digo por que en las fotos las cosas aparecen
mejor de lo que realmente son según mi opinión subjetiva y un poco cabrona.
En el mapa recomiendan
dos circuitos. La ciudad alta en la parte superior con la catedral, el casco
antiguo y la mayoría de monumentos turísticos, y la ciudad baja en la parte inferior
con los museos, teatros y zona de hoteles.
La catedral o
Kaptol queda a tiro de piedra así que allí nos hemos dirigido.
En la plaza de
la entrada hay una bonita fuente con esculturas doradas de 4 ángeles que para
mi mas bien son chicas, así que digamos angelas.
La fachada diría
que esta rehabilitada y es bastante interesante. Entramos a la catedral y el
interior es bastante digno. Mucha altura, bonitas cristaleras, en la parte del
fondo se adora al antiguo obispo que será algún beato y un altar de plata muy
labrado. Vale la pena. En el exterior esta rodeada de unas murallas estilo
medieval bastante grandes.
Salimos e
intentamos seguir el recorrido recomendado pasamos por un mercadillo y llegamos
a la calle Skalinska donde vemos unas terrazas muy interesantes para comer. Aprovechamos
que esta ahí la oficina de alojamiento que nos han dicho en la oficinal de
turismo y entramos a preguntar por lo importante, que es a ver donde vamos a
dormir esa noche.
De primeras,
es un Internet center que vende tabaco, le comentamos el chico que queremos
visitar el castillo y dormir por la zona. El chico es un encanto, muy educado y
todo atención. Nos intenta recomendar visitar mas tiempo Zagreb, y nos dice que
conoce un motel en ese pueblo pero que cree que lo están restaurando. Llama a
verios sitios y resulta que así es. Nos recomienda probar suerte en la cercana
localidad de Varazdin. Como no sabemos muy bien que vamos a hacer le damos las
gracias y seguimos el paseo por la ciudad.
Es ya hora de
comer, así que Intentamos buscar los restaurantes recomendados por la guía de
viajes Lonely Planet. Al final acabamos en la misma calle Skalinska en un
restaurante llamado Nokturno. La verdad es que comemos muy bien y de lo más
barato hasta ahora. Un rissoto gigante, ensalada inmensa y plato muy rico de
carne y pasta con 3 coca colas, nos sale unas 112 Kunas = 15€. Estupendo.
Andamos justos
de tiempo, así que decidimos quedarnos a pasar la noche para ver Zagreb mejo, que
sí parece que tiene cosas para ver y seguir el consejo del chico. Con toda la
informacion y guías que tenemos parece que lo están pidiendo.
Volvemos a
entrar a la oficina y el mismo chico, majísimo de nuevo, nos consigue un
apartamento con cocina en el centro de la cuidad por 50€. No tiene parking, ni
Internet pero dice que de lo que el tiene en su listado ninguno tiene esas cosas.
Eso en hoteles que son mucho más caros y que por algo es cheap accommodation.
Nos aconseja
un parking público cercano para dejar el coche hasta las 21 y nos recomienda retirarlo
a partir de esa hora que entre las 21 y las 7 no hay que pagar en la calle.
A medio camino
al parking donde hemos dejado el coche por la mañana se pone a diluviar.
Perdemos mucho tiempo y nos mojamos. Salimos del parking y nos encontramos con
un tráfico infernal y muy lento, no se si es normal o es por la lluvia. Las
calles tienen distinto nombre en nuestro GPS que en los mapas de que disponemos
y hay calles con direcciones contrarias a lo que eran o ahora peatonales. No
encontramos ningún parking público de los que pone en el mapa y para todo hay
que pagar y además no se puede estar más de 2 horas. Llueve y es un infierno.
Llegamos con
el coche finalmente en frente del apartamento y aparco mal pero delante del
apartamento para dejar las maletas. Nos está esperando el casero que nos enseña
el apartamento que no tendrá 20 metros cuadrados
pero tiene de todo, como si estuviera preparada para entrar a vivir. Todo muy Ikea
pero Croata. Le pregunto donde dejar el coche, por dios, y nos indica un
parking privado cercano. Lo encontramos al segundo intento.
Como tenemos
cocina en casa, compramos en un supermercado algo para desayunar al día
siguiente y como sigue lloviendo, aunque algo menos, descansamos un poco en
casa y nos lamemos las heridas. Hemos perdido 2 horas en esta aventura.
Tras descansar
volvemos a salir de casa y nos acercamos a la plaza central del señor con el
caballo. Decidimos continuar con la parte del recorrido de la ciudad alta que
no hemos visto esta mañana. Recorremos la calle Tkalciceva la cual antes era un arroyo que dividía las ciudades de
Kaptol y la de Gradec. Está llena de gente tomando copas en los muchos bares,
restaurantes y cafes que la pueblan.
Volvemos por
ella y cruzamos por Krvavi most o el
puente sangriento. En la antigüedad era
un puente (most) encima de un río entre las dos ciudades anteriormente
mencionadas el cual fue escenario de numerosas luchas entre ambas.
El circuito
nos lleva por una estatua ecuestre de San Jorge y el dragón una vez muerto este
ya, un puerta de piedra que era al único acceso antiguo a la ciudad, donde hay una
capilla de Santa María la madre de Dios de la puerta de piedra.
Llegamos a la plaza
de la iglesia de San Marcos que es el centro de la ciudad alta y la plaza mayor
de lo que era Gradec. Muy famosa por que los de Lego diseñaron en el tejado los
escudos del reino formado por Dalmacia, Croacia, Eslavonia y la ciudad de
Zagreb. Curiosamente solo vemos dos. Es broma lo de Lego pero es que lo parece.
En esa plaza
esta el parlamento Croata y ya lucen hasta bandera de la Comunidad Económica
Europea, aunque que yo sepa aún no lo son.
Bajamos y nos
encontramos en la parte alta de un funicular que debe unir las dos partes de la
ciudad la baja y la alta, aunque es el más corto del mundo. Desde allí hay unas
buenas vistas de la ciudad. A un lado de
la estación del funicular hay un paseo de castaños con una zona de poteo donde
se están preparando para dar un concierto con muy buena pinta para pasar la
noche.
Llegamos a la catedral de Santa Catarina fundada por los jesuitas. Vemos una puerta entreabierta y ahí me meto. Que acierto. Descubrimos las mejores vistas de todo Zagreb desde la antigua Gradec y además justo a la hora precisa para hacer fotos del atardecer. Que suerte.
Una vez pasada
la hora azul vamos bajando hasta la catedral de nuevo para verla de noche.
Sacamos unas fotos y volvemos a cenar en el restaurante de la mañana, el cual
tiene una carta impresionante variada. Realmente debe tener varios nombres pero
es el mismo. Todo el mundo que pasa es hispano parlante pero parecen más argentinos que españoles.
De nuevo nos
sale increíblemente barato, menos incluso que esta mañana.
Volvemos al
parking por la calle Ilica viendo pasar los tranvías azules tan característicos
de la ciudad. Sacamos el coche después de que nos cobren 6 Kunas cada hora y
aparcamos cerca de casa. EL problema surge cuando vamos a pagar las 2 horas
para librar de 7 a
9 y ninguna maquina nos deja. No se si por que es fuera de hora o por que hace
falta una tarjeta especial que desde luego no tenemos. Al día siguiente
tendremos que levantarnos temprano, tentar a la suerte o pagar las 200 Kunas de
multa. Todo en Croata por supuesto y nada en ingles para que los guiris no
podamos hacer nada. Ya os contaré como acaba la película.
Mañana el
castillo de Krakoscan y Eslovenia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario